Un microhub logístico es un pequeño centro de distribución ubicado estratégicamente dentro de ciudades o zonas urbanas para agilizar entregas de última milla. A diferencia de los grandes almacenes centrales, estos microhubs permiten acercar los productos a los clientes finales, reduciendo costos y tiempos de entrega. Imagina un punto intermedio entre el centro de distribución y el cliente, donde los paquetes son organizados y enviados de manera más rápida y eficiente. Estos espacios pueden ser bodegas pequeñas, estacionamientos adaptados o incluso contenedores móviles que funcionan como centros de distribución temporales.
Ciudades como Nueva York, Londres y Berlín ya están adoptando este modelo con hubs urbanos de distribución que combinan bicicletas eléctricas, lockers inteligentes y vehículos eléctricos para reducir la huella de carbono. En América Latina, las empresas de ecommerce están explorando estos centros para mejorar la experiencia de entrega en grandes ciudades con tráfico denso.
Con el crecimiento del ecommerce y la demanda de entregas cada vez más rápidas, los microhubs se perfilan como una solución clave para optimizar la distribución en ciudades. Las empresas que adopten esta estrategia no solo mejorarán su eficiencia, sino que también responderán a las necesidades de los consumidores modernos: rapidez, flexibilidad y sostenibilidad.
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Un microhub logístico es un pequeño centro de distribución ubicado estratégicamente dentro de ciudades o zonas urbanas.
Los picos estacionales representan grandes oportunidades para las empresas, pero también plantean desafíos logísticos.